Posesión de estatus moral
La posesión de estatus moral es la condición de merecer consideración moral. Un sujeto moral es una entidad que posee estatus moral.
Aunque normalmente hay acuerdo en que los humanos típicos son sujetos morales, hay debate sobre la condición de muchos otros tipos de entidades, como los embriones humanos, los animales no humanos, las personas futuras y los seres digitales sintientes.
La posesión de estatus moral no debe confundirse con la agencia moral. Por ejemplo, podríamos pensar que un bebé carece de agencia moral —ya que carece de la capacidad de distinguir entre el bien y el mal, y de actuar sobre la base de razones—, pero que sigue siendo un sujeto moral, en el sentido de que quienes tienen agencia moral deben preocuparse por su bienestar.
Si partimos de una teoría del bien bienestarista, la cuestión de qué entidades son sujetos morales puede dividirse en dos subcuestiones: ¿Qué entidades son capaces de tener bienestar? y ¿Qué bienestar es moralmente relevante?
En primer lugar, ¿qué entidades son capaces de tener bienestar? La mayoría de los científicos están de acuerdo en que muchos animales no humanos, incluidos mamíferos, aves y peces, son conscientes y capaces de sentir dolor,1 pero esta afirmación es más controvertida en filosofía.2 La cuestión es vital para evaluar el valor de las intervenciones destinadas a mejorar el bienestar animal en las granjas y el bienestar de los animales salvajes. Un campo de estudio más reducido, pero que despierta creciente interés, explora si los sistemas de inteligencia artificial pueden ser conscientes de formas que importan moralmente.
En segundo lugar, ¿qué bienestar es moralmente relevante? Hay quienes sostienen que los seres futuros tienen menos valor, aunque sean tan conscientes como los seres que existen actualmente. Esta reducción podría asumir la forma de una tasa de descuento sobre el valor futuro, de modo que las experiencias que ocurran dentro de un año valgan, por ejemplo, un 3 % menos que las del presente. Alternativamente, la reducción podría justificarse apelando a que las personas que aún no existen importan menos que las existentes, por razones relacionadas con el problema de la no identidad3 (véase también ética de la población). Estos enfoques son discutibles. Además, a la luz del número astronómico de seres que podrían existir en el futuro, asignar un valor no despreciable a las personas futuras implica que, al menos para las teorías bienestaristas, prácticamente todo el valor moral residirá en el futuro lejano4 (véase también largoplacismo).
Animal Ethics (2017) The relevance of sentience, Animal Ethics, septiembre.
Nick Bostrom & Eliezer Yudkowsky (2014) The ethics of artificial intelligence, en Keith Frankish & William M. Ramsey (eds.), The Cambridge Handbook of Artificial Intelligence, Cambridge: Cambridge University Press, pp. 316–334.
Shelly Kagan (2019) How to Count Animals, More or Less, Oxford: Oxford University Press.
William MacAskill, Darius Meissner & Richard Yetter Chappell (2023) Utilitarismo y ética práctica, en Tlön (trad.), Una introducción al utilitarismo, De Richard Yetter Chappell, Darius Meissner & William MacAskill, Madrid, sec. ‘The expanding moral circle’.
Luke Muehlhauser (2017) 2017 report on consciousness and moral patienthood, Open Philanthropy, junio.
Brian Tomasik (2014) Do artificial reinforcement-learning agents matter morally?, arXiv:1410.8233 [cs].
ampliación del círculo moral • axiología • especismo • valencia